Me temo que eso de “los 40 son lo nuevos 30″ nos lo hemos tomado muy a pie de la letra. Y, siguiendo el ejemplo, las que tenemos 30, también nos restamos unos diez años. Nos sumergimos en una eterna juventud, como si ser una mujer adulta fuese un castigo. Algunas, directamente, no han sabido superarlo y se han quedado ancladas en “la edad de la pava”, ignorando que, a pesar de estar tremendamente buenísimas, a los 30 ya NO todo vale. Se supone que una mujer que entra en la cuarta década ya ha vivido las tres anteriores. Toca una nueva, en la que la línea entre “sexy” y vulgar” se está haciendo más y más delgada y la evidencia de no saber cumplir los años- más y más gorda.
Estas son las 30 cosas que YA NO se perdonan a los 30. No nos vamos a engañar: jamás fueron elegantes, pero sí, perdonables. “Es joven” siempre fue un buen sustituto de “es cutre”. Una excusa que, te guste o no, ya se ha caducado.
- ¿Quieres decir que me estoy haciendo vieja?
- No, quiero decir que ya eres adulta, y cuanto antes dejes de hacer estas 30 cosas, antes dejarás de ser ridícula. Allá vamos.
30 cosas que “YA NO” a partir de los 30, cariña:
1. Pijamas de Mickey Mouse, braguitas de Hello Kitty y neceseres de Mafalda.
Vamos a ver, la sagrada creencia de que una braga de Kitty tiene su morbo probablemente viene de las pelis porno en las que los maduritos se lo montaban con las adolescentes, pero, si volvemos al mundo real, un hombre sin trastornos graves no tiene porqué imaginar que folla a una colegiada. Con los pijamas pasa exactamente lo mismo y deja de tonterías del tipo: “Nooo, es que el pijamita de Mickey es tan calentito”, hazme el favor. Lo que calienta es el tejido, no un ratón de Disney.
2. Blusas de animalitos
La invasión de las ardillitas, loritos, gatitos, perritos y bichitos estampados en las blusas de las treintañeras es la pesadilla del último año que, desgraciadamente, ha llenado las calles de todo el mundo de mujeres con caras de no haber roto un plato en su vida. Las mismas que se convierten en falsas rockeras con caras de femme fatale a partir de medianoche. Los carnavales son en febrero, queridas.
3. Dos trenzas o dos coletas
¿Es necesario que lo explique?
4. Actitud de pánfila
No, no mola. Jess de “New Girl” te hace reír, pero en realidad es un coñazo de tía. Es más, la cara de pánfila de Zooey sólo es llevable en “500 Days of Summer”, en la vida real hasta tú te reirías de ella. La cara de tonta inocente es válida a los 18 o si quieres rodearte de la gente que te tome por idiota.
5. Nail art
O, que es lo mismo, el mal gusto de llevar las uñas disfrazadas de sandía, mariquita o bandera de Estados Unidos. Las manos son la tarjeta de presentación de una mujer, así que no hace falta poner en evidencia el exceso de tiempo libre y la falta de madurez.
6. La purpurina
Si a tu edad es la única forma de brillar, replantéate tu vida.
7. Tener EL poster de Audrey en tu casa
Asúmelo una vez por todas: nunca serás ella. Penélope Cruz todavía no lo tiene claro, ¿Pero tú?
8. Estar enganchada a “50 sombras de Grey”
Si el libro te parece morboso, atrevido, erótico, excitante, prohibido; si te despierta las ganas de ser “una chica mala”, y, sobre todo, si te parece pornográfica, tenemos un problema con la sexualidad. Si te parece bien escrita, con el criterio.
9. Faldas cortas
Hay una línea muy fina entre lo sexy y lo vulgar. Y si hablamos del largo de una falda, a lo 30 años esta linea se sitúa algo más de un palmo por encima de la rodilla.
10. Gorros con orejitas
No es divertido. Es penoso.
11. Hablar como una camionera
Soltar algún que otro taco para darle fuerza a las expresiones es estrictamente necesario. De vez en cuando. Decir a los amigos que son unos “mongolos de mierda y que los follen a todos, joder” y responder que “estás de putísima madre” a la pregunta “¿qué tal?” ya no hace falta. Créeme. A tu edad ya no te van a llamar “rebelde”, sino “garrula”.
12. Tener funda de móvil de Playboy
Con su pompón y sus orejitas. Por el amor de Dios. Por el amor de Dios.
13. Ser esclava de la moda
Filtrar en función de tu gusto, estilo y cuerpo. Regla de oro.
14. Hacer globos con el chicle
No seas marrana, anda.
15. Apuntarse a los castings de los realities
Si sigues queriendo ser famosa por haber salido en un reality, no sé qué cojones estás haciendo leyéndome. De verdad te lo digo.
16. Llevar cascos grandes a juego con las zapatillas
Independientemente de si sigues practicando Street Dance. Una cosa es una cosa, y otra cosa es otra cosa.
17. Ir sin sujetador por la vida
Por muy perfectas que sigan siendo tus tetas, no es plan. También te digo que comprar los sujetadores en Oysho es imperdonable a tu edad. Sujetador sirve para sujetar (¿lo sabías?). Pues eso. Y si no lo sujetas ahora, mañana ya no habrá solución, nena.
18. Seguir perfumándote con Nenuco
Así como los sujetadores sirven para sujetar, sacacorchos para sacar los corchos, quitanieves para quitar la nieve, las colonias de bebé son para los bebés.
19. Hacerte sexy comiendo un helado…
…y los demás gestos de pelis americanas de los adolescentes. No me seas.
20. Ser gótica
A esa edad pertenecer a cualquier tribu urbana es imperdonable, pero si siendo Pin Up aún puedes disfrutar unos 20 años más por aquello de teñirte las canas en rubio platino, marcar la boquita roja y subir las tetas a presión, ser gótica ya no favorece. Bueno, nunca ha favorecido.
21. Tener la canción de verano de tono de tu móvil
Y la de invierno, y la de primavera, y la de otoño…
22. Hacer “V” de “Victoria” en las fotos
Sin comentarios
23. Levar chanclas
Hawaianas para la playa. No hay más.
24. Que se te vea el tanga
Por mucho que la Monster High de tu sobrinita lo lleve así, no está de moda, que no te engañen.
25. Follar en un coche
No hace falta. Te aseguro que eso de clavarte el freno de mano en la rodilla ya no es necesario y tener ciática al día siguiente es desagradable.
26. Ligar con un barmen para conseguir copas gratis
O, todavía peor, con un RRPP para que te ponga en la lista. Un poquito de dignidad, señorita.
27. Subir al podium para bailar
Oh, no.
28. Hacer botellón
Hay crisis, lo sé. Pues quédate en casa con unos amigos y tómate una cervecita.
29. Tatuaje tibetano a lo Angelina
Sobra. Porque, además, cuando te lo vean, sabrán perfectamente a quién imitas. Y como que no.
30. Abrir un ego blog
Ya no vas a ser modelo. Ya no.